Queridos alumnos: ahora les parece muy normal que las
personas viajemos en los trenes y en las líneas de Metro de un lugar a otro en
la ciudad. Las bases de triciclos y bicicletas y los taxis bicicleta no era tan
comunes hace 40 años. Además los oficiales de policía usaban armas como si
fueran criminales.
Los niños no podían
jugar en las calles porque las personas viajaban, a menudo sólo una, en autos,
que se usaban en el interior de la ciudad y no como ahora que sólo se usan para
viajar a otras ciudades y con ese exceso de potencia se hacia peligroso que la
gente caminara libremente por las ciudades.
Las personas debían
caminar por espacios limitados, como los que ahora utilizan las líneas del
Metro y los espacios amplios donde ahora caminamos, jugamos, andamos en
bicicleta, paseamos a las mascotas, tenemos las pistas de patinaje, las canchas,
las marchas de expresión cívica y los paseos, era usados por los autos. Todavía
hay muchas ciudades en países neoliberales donde los autos tienen preferencia, son
países aferrados a la producción masiva de motores, pero entendamos, es que somos la
primer ciudad en adoptar las medidas de cambio y que en nuestro país se inició
la revolución. Antes, era frecuente que los gobiernos sirvieran a las
corporaciones en vez de a la gente.
Hoy casi todos
entendemos en México que una calle habitada por niños, ancianos y muchos humanos
es una calle segura y feliz, pero en este mismo siglo no lo teníamos tan claro, valorábamos más, y
esto les parecerá chistoso, que la gente se impresionara por demostrar que algunos
podíamos tener muchos autos por familia y que fueran grandes y consumieran más
energía de la necesaria.
Eso hacía, claro,
que si todos pensaban en mostrarse superiores, teniendo autos, se discriminara
a quienes no tenían o no podían usarlos, haciéndolos correr por su vida cruzando
entre autos, o viajar en lo que se llamaba: “camiones de transporte urbano”,
que eran como vagones del Metro sin acceso para adultos y sillas de ruedas, sin
espacio para bicicletas o maletas, estaban feos y se movían mucho, los
conductores a menudo se lastimaban porque no tenían buena suspensión. Eran
altamente contaminantes, contribuyeron mucho al problema de calentamiento
global que ha estudiado en historia de las ciencias.
Afortunadamente
ocurrió algo que ayudo para que ahora tengamos esta ciudad segura, sin autos, a
la que se puede llegar a cualquier lugar en 10 minutos sin contaminar y por la
que podemos ejercer nuestros derechos a movernos libremente y divertirnos en
cualquier espacio público, eso que se dio y cambió nuestro mundo fue el
fenómeno de las marchas de expresión cívica. Esas, como ya saben, no son muy recientes pero en nuestra ciudad se
fueron volviendo más comunes en el 2013, con mucha influencia de las grandes
marchas de Madrid, las Mega Marchas de México D.F. del 2012, la primavera Árabe
del 2011, los movimientos de los indignados y otros fenómenos que daban balance
a los poderes económicos del neoliberalismo que dominaba el mundo anterior a la
revolución de 2022 conocida como: “Revolución de los medios son para todos”.
El punto es que
entre más gente marchaba más claro les quedaba que las calles son para los que
las caminan. Se veía absurdo que miles de personas fueran detenidas por policías
armados para que pasaran 100 autos que llevaban 200 personas a lo mucho.
En el 2020 un
grupo de jóvenes marchantes fue atacado por policías armados que defendían el
derecho de paso de autos. Hubo cientos de muertos, entre ellos dos hijos del
Diputado Local Francisco Riverola Ruíz quien inició la legislación para
prohibir el uso de automóviles en la ciudad y de que la policía usara armas de
fuego.
La resistencia
fue terrible, se argumentaba que seriamos vulnerables a los ataques de fuerzas
ilegales que sí usan armas de fuego, pero al final se demostró que la mayor
cantidad de muertes violentas se hacía con armas de las fuerzas públicas. Si
las policías no podían estar armadas, no habría tráfico legal de armas y
ninguna arma podría ser considerada legal. Los clubes de tiro fueron aceptando,
a partir de muchas muertes violentas cercanas, cambiar al arco y las flechas y
se inicio el entrenamiento en artes marciales para policías y para uso de armas
como flechas, espadas, chacos y varas.
Se instauraron las brigadas civiles de protección
ciudadana con entrenamiento marcial.
Como al desaparecer los autos, los secuestros
se volvieron más complicados y con las calles llenas de personas y ayudó mucho
que casi nadie tenía que pasar por espacios creados por la vialidad automotriz
como: callejones, puentes, distribuidores viales, que al ser prohibitivos para
el peatón se volvían espacios de ilegalidad. El robo de autos, fuerte fuente de
financiamiento del crimen dejó de ser negoció en San Luis Potosí. El consumo de
alcohol se volvió menos riesgoso y dejó de ser motivo de tanta acción pública.
Menos corrupción y menos interés del crimen organizado por hacerse cago de ese
negocio que se distribuyo en calles centrales, bien iluminadas y muy
concurridas por familias.
Recordarán las
historias de las bandas criminales en las que los llamados “sicarios” reusaban
atacar con armas de fuego a policías y civiles no armados. Las madres y esposas
que entregaban a destrucción las armas de fuego de sus hijos y esposo para que
se destruyeran.
La construcción de
los almacenes de autos en la periferia fue una obra monumental, pero mantener
un auto para usarlo sólo para viajes fuera de la ciudad y pagar el costo de almacenaje,
se volvió absurdo para muchos que se deshicieron de sus unidades. Tener autos
dejo de ser motivo de orgullo y eso desalentó el deseo de tener vehículos costosos.
Las cosas no fueron
perfectas pero después de la revolución de los medios en 2022, se tomó esta
ciudad como modelo de nación. Si queríamos dejar de vivir en la violencia debíamos
caminar muy distinto, dijo el presidente Robles y promovió reformas que fueron aprobadas
en 2025 y ahora todo el país es un país sin armas y sin autos en las calles.
Aún hay crimen, pero cada vez hay menos armas en el país. La fuerza más importante en la nación la tenemos nosotros,
los que caminamos las calles dignos de ser mexicanos. Revisaremos más detalles
en las lecturas y la próxima semana revisaremos como se dio la reforma política que limito a los partidos políticos. Con esto termino mi
charla de la clase Dignidad, libertad e igualdad en México ¿Alguna pregunta jóvenes?
CARLOS ÁVILA PIZZUTO
#CentroRe
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